lunes, 7 de julio de 2014

QUINTO BIOLÓGICO Y SEXTO DERECHO: Ray Bradbury: Información general.

                                     RAY BRADBURY: CONTEXTO HISTÓRICO.

Bradbury nace en 1920, año particularmente mítico para los estadounidenses.  Los “twenties”, los “años locos”, señalan un período de auge comercial y financiero directamente derivado de la expansión industrial en lo interno y de la penetración en la economía de varios países  bajo la forma de intercambio desigual. El exceso de afluencia de capitales hacia EEUU durante esa época, produjo un resultado inevitable: el desplazamiento del centro de gravedad de la economía mundial. Inglaterra cedió paso a EEUU en el primer plano de las potencias capitalistas y el patrón oro, imperante hasta entonces, se vio sustituido  por el dólar, moneda en franco ascenso.
La prosperidad estadounidense posterior a la Primera Guerra Mundial fue constante y acelerada. Wall Street centralizó la actividad bursátil mundial. El auge de la juventud, la independencia de la mujer, la mayor liberación de los hábitos sexuales, la renovación de las artes, entre ellas las decorativas, el impulso arrollador del jazz y el reflejo de los movimientos de vanguardia europeos, principalmente el Dadaísmo y el Surrealismo, caracterizaron la época.
El auge de los medios de comunicación masivos como el cine y la radio, el enorme crecimiento de Hollywood y la aparición del sistema de “estrellas” fueron piezas de este complejo rompecabezas cultural.
Gran parte del globo resultó deudor de EEUU y la creciente industrialización unida a altos niveles de empleo, salario y despilfarro, tendieron a la crisis con la misma celeridad con que habían llegado al apogeo.
Proceso perfectamente lógico dentro del sistema capitalista, la superproducción trajo ruina y ruina profunda. En 1929, quince millones de desocupados, más un importante número de subocupados, sobrevivían y morían mientras otros ciudadanos aprendían a bailar ritmos de moda.
Después de una crisis aguda, la economía volvió a sus rieles habituales. Un proceso lento aunque sostenido, no logró ocultar la honda problemática social.: la discriminación a los afrodescendientes, el casi exterminio de los indios, los reclamos obreros y un consumismo alienante. A partir de la década del 30, esta situación interna y una intromisión mayor en los países latinoamericanos y coloniales en general, fueron rodeando los músculos del gran coloso.
Los años cuarenta iban a estar marcados por la II Guerra Mundial, la contienda de mayores proporciones y más devastadora que ha padecido la humanidad. Los dos primeros años de guerra fueron de relativa calma para los Estados Unidos, que veían el conflicto aún lejano y propio de la vieja Europa, siempre enzarzada en disputas territoriales. Pero a finales de 1941, con el ataque japonés a la base militar en el Pacífico de Pearl Harbour, los estadounidenses entraban de lleno en el conflicto, que desde ese momento adquirió proporciones mundiales. Los efectos de la guerra y la recesión económica que trajo consigo no tardaron en hacerse sentir en todos los sectores.
Al terminar el conflicto mundial, el liderazgo de Estados Unidos en Occidente, era incuestionable. No obstante, la guerra había generado nuevas dificultades y necesidades que fueron modificando su realidad interna.:
·         Un sentimiento de lealtad hacia la patria promovió el alejamiento de ideologías de izquierda volcando al electorado hacia posiciones conservadoras.
·         El crecimiento industrial demandó mano de obra lo que permitió un aumento generalizado de salarios homogeneizando la sociedad.
·         Paralelamente al aumento de matrimonios se dio un crecimiento de los divorcios que afectó la estructura familiar tradicional.
A esto deben sumarse los graves problemas internos heredados de la Segunda Guerra Mundial, como la reconversión de la economía de guerra en una de paz, la desmovilización y reinserción de doce millones de soldados y los temores a una posible superproducción y desocupación.
                Los años 50 fueron conocidos como una época de opulencia y bienestar económico, lo que confirmó a esta nación como la fortaleza del capitalismo.
CONTEXTO LITERARIO.
                Bradbury forma parte de la más importante generación de escritores de ciencia ficción y fantasía, aquella que publica sus obras fundamentales por la década del 50. Al período comprendido entre 1938 y 1960 se le denomina “época de oro” de la ciencia ficción. Por los años 50, aparecen las mayores creaciones de varios autores, hoy verdaderos clásicos de esta vertiente literaria. Es el caso de “Los cristales soñadores” (1950) y “Más que humano”(1953) de Theodor Sturgeon. También pueden incluirse “Yo robot”(1950) y la trilogía “Fundación “ de Isaac Asimov, “Fin de la infancia” (1953) de Arthur Clarke y las continuamente reeditadas “Crónicas marcianas” (1950) y “El hombre ilustrado” (1951) de Ray Bradbury.
¿QUÉ ES LA CIENCIA FICCIÓN?
                Mucho se ha discutido sobre ello y es difícil alcanzar unanimidad al respecto. Sin embargo, algunas características intrínsecas asoman con alguna evidencia. La ciencia ficción constituye, fundamentalmente una vertiente literaria muy cercana a la “fantasía” en cuanto a su no necesaria referencia a acontecimientos ocurridos u ocurribles. Pero, mientras en la “fantasía” nunca suceden episodios verosímiles, en la ciencia ficción puede adelantarse lo que vendrá o ensayarse hipótesis luego verificables científicamente.
                Una definición comprensiva a la vez que amplia parece la del propio Asimov:
 “ES LA RAMA DE LA LITERATURA QUE TRATA SOBRE LAS RESPUESTAS HUMANAS A LOS CAMBIOS EN EL NIVEL DE LA CIENCIA Y TECNOLOGÍA”
La aparición a menudo de máquinas o principios científicos  en la anécdota adquiere, normalmente, relevancia. Consideramos que esta definición sí se acerca sustancialmente a la característica del fenómeno.
ACERCAMIENTO A LA TÉCNICA NARRATIVA BRADBURIANA.
La prosa de Bradbury se distingue por algunos procedimientos narrativos y un alto nivel poético. Metáforas, símiles y personificaciones  se anudan perfectamente al argumento. También es parte de su estilo el uso del polisíndeton y de una adjetivación precisa y nada grandilocuente.
En cuanto a las técnicas narrativas más frecuentes encontramos las historias paralelas, la ficción dentro de la ficción, la superposición de épocas disímiles, el flashback. Presenta diálogos breves y acelerados a la vez que expone repeticiones que le otorgan un ritmo peculiar (“Ese sol”, por ejemplo en La pradera)
Merece una mención especial la denominación de los personajes de sus historias. Ponen de relieve una característica psicológica predominante o sugieren alguna circunstancia física específica. No obstante, la ironía puede rodear estas denominaciones. Muestra clara de ello son Wendy y Peter.
TEMAS.
La narrativa de Bradbury presenta una amplísima gama de temas: la infancia, la soledad, el optimismo, el silencio, el miedo, los viajes, en el espacio y el tiempo, la inadaptación, la magia, la maquinaria, la marginalidad, la Literatura.
Por otro lado hallamos temáticas como el tiempo, la apariencia y el ser, la ambivalencia, la muerte (individual o colectiva) y Dios.
LA PRADERA.
Publicado originalmente en el “Saturday  Evening Post”, este relato abría ya la primera colección de cuentos reunidos bajo el título de “El hombre ilustrado” (1951), un libro de cuentos estructurado de una forma muy particular. Al comienzo del libro, un narrador protagonista relata el encuentro en una carretera con un “hombre ilustrado”; un personaje cuya piel soporta, milímetro a milímetro los más diversos y hermosos tatuajes. Cada tatuaje ilustra una historia y, mirándolos fijamente, el narrador se interna en los cuentos vinculados a estas imágenes. De esta manera, con cada cuento asistimos a una ficción incluida dentro de una ficción, la del tatuaje que se anima en el cuento del hombre ilustrado, que también es ficticio.”La pradera” constituye la ilustración que empieza a moverse en primer término.
Respecto de sus antecedentes podemos anotar que el parricidio y la alienación fueron temas que proliferaron en la narrativa universal de principios de siglo XX. Sin embargo, el gran antecedente está en la propia producción braburiana en el cuento denominado “Vendrán lluvias suaves” que forma parte del libro “Crónicas marcianas”. En el cuento mencionado aparece claramente un cuarto en el que se materializaban animales integrando una selva a la acción: “En el cuarto de los niños ardió la selva” expresa el narrador. “Los leones azules rugieron, las jirafas moradas escaparon dando saltos…” A pesar de la ausencia de personajes humanos y de otras diferencias, el embrión espacial de “La pradera” late, indudablemente, en este selvático cuarto de los niños.
En cuanto a la vertiente literaria” La pradera” puede incluirse dentro de una ciencia ficción liviana, o no “dura” porque, evidentemente, constituye éste, el único elemento que se aparta claramente del realismo.
Muchos de los temas principales de Bradbury aparecen en esta creación literaria. Entre los más notorios merecen citarse: la muerte, la apariencia y el ser (¿quién manda en realidad, los padres o la casa, o los niños?), el tiempo (Hubo un tiempo justo para deshacerse de la casa. Pasó), Dios (los niños y el cuarto de juegos crean la fantasía que se desee. No hay límites para su creación)
Podemos percibir también, una extraña forma de ocupación. La casa ocupa la mente de los niños, no hay otro interés equiparable a ella.
La ambivalencia  se materializa en la figura de los padres que terminan rechazando lo que antes les había atraído tanto. Los niños, en cambio, permanecen fieles a su casa, seguros de su inalterable amor.La infancia habla por estos hermanos unidos, dos en uno, tanto en fantasía como en venganza.
Esto último marca una forma de inadaptación. Los padres no se adaptan a la casa mientras que los niños se niegan a adaptarse sin ella.
El optimismo inicial de los padres, derivado de una desmesurada confianza en la ciencia (“genio mecánico” dirá George”), se convierte pronto en sombría preocupación, y la casa “de la vida feliz” deriva en lugar de sacrificio y muerte.
El viaje en el tiempo y el espacio lo proporciona el cuarto de los niños, esa especie de agencia de viajes que cumple, eficientemente, con los deseos de sus clientes.
Sin mucho esfuerzo en la lectura, encontramos el tema del miedo, planteado desde el diálogo inicial y recorriendo todo el cuento.
También hay lugar para la magia en la manifestación externa e instantánea de un objeto pensado con fuerza (“Los niños pensaban en cebras y había cebras”)


               

Material extraído y adaptado de ”Historia del mundo actual 4”, editorial Santillana y “Un conejo en una galera espacial”, Lauro Marauda, editorial Técnica.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.